2019
23 de abril -
Con una mirada extranjera y local al mismo tiempo (desde su tierra natal en Barcelona, hasta Medellín y sus alrededores), Camps investiga el paisaje y su contexto para luego traducir los mensajes de los diferentes lugares que transita y habita a través de la fotografía.
Escultures i focs olímpics (Esculturas y fuegos olímpicos) es un proyecto en colaboración con Eulàlia Rovira en donde focalizaron la mirada en la inversión de docenas de esculturas públicas que se construyeron en Barcelona para la celebración de los Juegos Olímpicos. Con la idea acuñada por el alcalde de la época, Pasqual Maragall, de “monumentalizar la periferia”, un gran número de esculturas hechas por artistas locales e internacionales fueron construidas participando de la transformación que la ciudad experimentó pasando del modelo industrial a su absoluta masificación turística. Con una bolsa llena de fuegos artificiales y una mecha, visitaron esas esculturas para celebrar su nacimiento dos décadas atrás, y cuestionar la vigencia de la modernidad que aquellos monumentos debían acarrear, cuando una mirada optimista cubría a toda la ciudad por la recién estrenada democracia y las grandes inversiones. Hoy, estas esculturas se han vuelto “paisaje” y pasan inadvertidas ante la mirada de locales y extranjeros mientras el mundo y Cataluña siguen teniendo cuestionamientos un año después sobre los resultados del referendo independentista.
El resultado de este trabajo es una serie de collages fotográficos de cinco tonos (cada uno de los colores olímpicos) de cada escultura con las pequeñas fuentes artificiales retratando la festividad, donde las llamas son demasiado débiles y la luz diurna desmitifica el espectáculo al que eventos como las olimpiadas suelen someter a las ciudades. Así, vemos cómo su obra modifica pequeñas dinámicas o preceptos sociales para cuestionarlos por medio de estructuras, en apariencia inofensivas, pero que se traducen en discursos con un alto contenido crítico e irónico, que disponen al espectador entre el absurdo y el cuestionamiento. De esta manera, rescata imaginarios propios de la cultura popular y los
recontextualiza en situaciones que propician lecturas discordantes de su sentido habitual.
Guayaba dramática es un proyecto de fotografías de frutas exprimidas contra el suelo por los pies de los transeúntes, de los carros o por el simple impacto de su caída contra el suelo de asfalto y concreto. Estas imágenes recogen una situación cotidiana para Medellín, ciudad frutal como pocas ha visto el artista, y que se debate entre la fertilidad del trópico dando frutos a cada esquina y el anhelo de una modernidad asfaltada. A diferencia de Escultures i focs olímpics y por más colores fuertes y viscerales que encontremos por el camino, estas imágenes representan lo que no queremos ver: una carencia de armonía y balance entre el humano y la naturaleza.
Estas fotografías son un reconocimiento a la extraña y complicada convivencia entre lo artificial, es decir, aquello generado por el ser humano, como la propia ciudad, y aquello natural, que pervive, convive y persiste con dificultades, caos, accidentes y torpezas a pesar de la humanidad y de sí misma.
De manera paralela, la serie de Guatapé completa las letras pintadas de la roca del Peñol, generando una re-escritura con diferentes palabras que Guim Camps propone como posibles topónimos. Palabras reveladoras del entramado social en el territorio. Aquí, la historia se escribe entre lo político y lo poético. Desde la época de la colonización hasta hoy, el paisaje continúa siendo una disputa física y simbólica en el país, ricos terratenientes, ejércitos, grupos insurgentes y contra-insurgentes, empresas privadas, mafias, o el gobierno, litigan por la propiedad de las tierras. En esta ocasión, el intento de escribir el nombre del municipio se convierte en una manera de dominar o poseer esa formación geológica, no en sí misma sino en su potencial simbólico. El resultado de las fotografías de Guim Camps generan una de-formación del paisaje según sus diferentes territorios, culturas e historia.